¡Oh, muchacho!
Vive lo que quieras, pero has de morir.
Ama lo que quieras, que tendrás que abandonarlo.
Haz lo que quieras: encontrarás su fruto...
¡Oh,
muchacho!
¿De qué te ha servido aprender la ciencia de
la especulación y la polémica,
la medicina, la poesía, la métrica, la astronomía,
la retórica y la
gramática, si te han hecho perder tu tiempo manteniéndote
ajeno a tu Señor?
En el verdadero Evangelio de Jesús he leído
lo siguiente: "Desde el momento
en que un cadáver es depositado sobre las parihuelas
y es conducido al
cementerio hasta que se le asoma a la tumba, Allah por medio
de su Majestad
le hace cuarenta preguntas.
La
primera de ellas es:
'¡Oh, siervo mío! Has procurado mejorar tu imagen
ante la gente durante años
y ni un momento te has adornado para Mí. Cada día
he mirado en tu corazón y
te he dicho: 'Cuánto haces por otros y nada por Mí
mientras te colmo con mis
favores'. Pero eras un sordo que nada oía...".
Iman
Al Ghazzali
transcripto por Mahmud
|